Subgénero: Ficción gótica, Novela rosa, Novela de aprendizaje, Crítica social
Año de publicación: 1847
Resumen de Jane Eyre, de Charlotte Brontë
Jane Eyre es una novela romántica, de las más conocidas del siglo XIX en habla inglesa. Fue escrita por Charlotte Brönte y publicada en 1847. En su tiempo fue una obra bastante exitosa, ya que tuvo buena acogida tanto por la crítica, como por los lectores.
Se trata de una historia de lucha, resiliencia y amor, mezclada con elementos de misterio e intriga. En sus páginas el lector es testigo del camino de crecimiento de Jane, desde que era una pequeña niña huérfana hasta convertirse en una mujer con temple, destinada a vivir una gran historia de amor.
Jane Eyre es huérfana desde muy pequeña, por lo que queda a cargo de su tío, el señor Reed. Sin embargo, después de mudarse con él, al poco tiempo su tío fallece y Jane queda a cargo de la señora Reed, esposa del difunto. En esa casa sufre todo tipo de maltratos, tanto por parte de su tía política, como de sus primos. Pero Jane no era de carácter dócil precisamente y termina revelándose contra todos.
Su tía, harta de tener que soportar a una niña que consideraba poca cosa, sin educación y molesta, decide enviarla a un internado cristiano de señoritas como ella, llamado Lowood. Este era un lugar precario y deteriorado que solo sobrevivía por la caridad de algunas familias ricas de la región.
Madurez y precariedad
Allí llega Jane con lo poco que tenía y pronto comienza a vivir una vida de penurias y carencias. En los meses de más duro invierno, las señoritas no tenían buen abrigo ni calzado, por lo que soportaban un terrible frío y un dolor insoportable en los pies por las caminatas sobre la nieve. Eso sin contar los días de hambre que no las dejaban siquiera pensar con claridad.
Pese a todo, Jane logra instruirse y culminar sus estudios. De manera que crece como una joven educada y formal. Durante su larga estadía en Lowood hace una buena amiga, que termina falleciendo de tuberculosis y también recibe madrinazgo de una sus profesoras, la señorita Temple. Gracias a esta también se convierte en instructora de la institución. Pero Lowood cada vez está más degradado, y al llegar la peste mueren muchas alumnas, al tiempo que la señorita Temple se casa y se va.
Extrañas experiencias en la adultez
Jane ya no tenía nada que hacer en el internado y decide buscar trabajo como institutriz. Publica un anuncio en el periódico y pronto recibe una carta de la señora Fairfax, el ama de llaves de la mansión Thornfield. El trabajo era para instruir a una niña francesa de 8 años, llamada Adèle, por un salario muy superior al que recibía en ese momento.
Sin pensarlo, Jane acepta y parte hacia Thornfield con su maleta. Al llegar, pronto se da cuenta que no es una familia común. El señor Rochester, amo de la mansión, nunca estaba en casa y por las noches se escuchaban ruidos y risas de una mujer. La señora Fairfax le cuenta que todo era provocado por una tal Grace Poole, criada de la mansión.
Aunque las condiciones de vida para Jane nunca habían sido tan favorables como en ese momento, no puede evitar sentir que le falta algo. Reflexionando sobre esto, planea una visita al pueblo, pero en el camino ocurre algo que cambia su vida para siempre. Se encuentra con un misterioso hombre que cae de su caballo, ella lo ayuda y conversa con él, sin percatarse de que se trata del señor Rochester, su patrón. Había regresado a Thornfield.
El señor Rochester y el amor
Él y Jane tienen largas conversaciones en las que ella se convierte en su confidente, aunque también el señor Rochester cuestiona su carácter aparentemente imperturbable e inclinado a la corrección. Sin embargo, Jane siempre argumenta razonablemente acerca de estos cuestionamientos, cosa que atrae mucho la atención del caballero.
En una ocasión, Jane escucha ruidos y sale al pasillo para darse cuenta que había fuego en el cuarto del señor Rochester. Rápidamente entra y lo salva de quemarse. Esto lo deja eternamente agradecido con ella.
Pero pronto, el señor Rochester se vuelve a ir, se ausenta por un tiempo y Jane comienza a sentir el fuerte tedio que esto le produce. Cuando por fin regresa, lo hace con un grupo de amigos entre los que se encuentra la señorita Blanche Ingram, de quién se decía que era objeto de amor del señor Rochester. Es en ese momento en el que Jane se da cuenta que está enamorada de él.
Un casamiento infortunado
Pronto llega la noticia de que Rochester y Blanche se habían prometido en matrimonio. Esto le rompe el corazón a Jane, quien le confiesa sus sentimientos a Rochester. Éste le corresponde y le da alivio al contarle que todo había sido una treta para provocarla y ver si lo amaba. Entonces, le pide matrimonio y ella acepta feliz.
Antes de la boda ocurre un episodio extraño en el que una mujer rompe su velo de novia. La explicación que le dan es que había sido Grace Poole. Sin embargo, el día de la boda se descubre toda la verdad. Unas personas llegan e interrumpen la ceremonia para decir que el hombre no se podía casar con Jane, ya que estaba casado con Bertha Mason. Realmente, había sido ella la que había provocado todas esas situaciones misteriosas en la casa.
Rochester explica todo. Se había casado con Bertha engañado por su familia, nadie le había dicho que sufría una enfermedad mental. Una vez casado, la mujer perdió la cabeza y él decidió aislarla en un cuarto para seguir con su vida. Era una injusticia. Sin embargo, Jane hizo lo correcto y lo abandonó.
Un final agridulce
Después de vagar un poco por los pueblos aledaños, Jane conoce a una familia que la acoge, los Reevers. Allí rehace su vida, consigue trabajo como institutriz en la escuela del pueblo e intenta seguir adelante. A su vez, recibe la noticia de la muerte de un tío que la había buscado durante mucho tiempo, quien le hereda una considerable fortuna.
Pero Jane no era feliz. Una noche escuchó en sueños cómo el señor Rochester la llamaba desesperadamente. Con toda su valentía decide ir a buscarlo, pero encuentra Thornfield en ruinas. Bertha incendió toda la propiedad y saltó por una ventana, muriendo al instante. El señor Rochester había quedado ciego. Ambos se reencuentran y finalmente se casan.
Personajes de Jane Eyre
Personajes principales
Jane Eyre: Es la protagonista y narradora de la historia. Jane es una joven huérfana y poco convencional que trabaja como institutriz en Thornfield Hall. Es una mujer valiente, independiente y de fuerte carácter.
Edward Rochester: Es el dueño de Thornfield Hall y el interés amoroso de Jane Eyre. Rochester es un hombre de carácter complejo y enigmático, con un pasado turbio. Su relación con Jane se desarrolla a lo largo de la novela.
Personajes secundarios
Mrs. Reed: Es la tía de Jane y su tutora legal. Es una mujer cruel y despiadada que maltrata a Jane durante su infancia y la envía a la escuela Lowood.
Mrs. Fairfax: Es la ama de llaves de Thornfield Hall. Mrs. Fairfax es una mujer amable y comprensiva que se preocupa por el bienestar de Jane y actúa como una figura materna para ella.
Adele Varens: Es una joven francesa y pupila de Edward Rochester en Thornfield Hall. Adele es una niña vivaz y alegre que desarrolla una relación cercana con Jane Eyre.
Bertha Mason: Es la esposa enajenada mentalmente de Rochester. Bertha es un personaje misterioso y problemático que está encerrada en el ático de Thornfield Hall.
Estos no son los únicos. La novela está llena de personajes secundarios interesantes que contribuyen a la trama y el desarrollo de la historia.
Análisis de Jane Eyre
Jane Eyre pertenece al género de la novela de desarrollo o bildungsroman, que narra el crecimiento y la madurez de la protagonista a lo largo de su vida. La novela está escrita en primera persona desde la perspectiva de Jane Eyre, lo que permite al lector tener una conexión íntima con su pensamiento y experiencia.
La obra aborda una serie de temas relevantes que han resonado en los lectores a lo largo del tiempo. Algunos de ellos son el amor, la identidad, la moralidad, la búsqueda de la independencia, la igualdad de género y la lucha contra la opresión.
La narrativa de Jane Eyre es fluida y cautivadora, lo que mantiene el interés del lector a lo largo de la historia. La novela sigue una estructura cronológica, dividiéndose en varias etapas clave de la vida de Jane, desde su infancia maltratada hasta su crecimiento y búsqueda de independencia.
Por otra parte, Jane Eyre aborda críticas sociales y cuestiones de género de su época. Brontë desafía las normas sociales restrictivas y presenta a una heroína femenina independiente y autosuficiente. La novela también critica la opresión de las mujeres y destaca la importancia de la igualdad y la libertad individual.
Última actualización: 15 noviembre, 2023
Lector empedernido y amante de la fotografía. Me encanta la literatura de fantasía y ciencia ficción. Escribo resúmenes, opiniones y reseñas para ayudarte a decidir tu próximo libro.